Cada año llegan a España
miles de menores extranjeros buscando una mejor vida. Para ello recorren
cientos de kilómetros solos, jugándose la vida y sin saber si podrán llegar a su
destino. Cuando lo hacen, en el caso de España, son confinados a centros
masificados sin recursos ni personal. Es lo que denuncia Unicef que exige al
gobierno un Plan Nacional de Acción que proteja y dé cobertura a estos menores.