Bruselas ha obligado por primera vez a un propietario a vender su casa, situada en el centro de la capital y que llevaba diez años desocupada. El Ayuntamiento ha querido lanzar un mensaje claro a los propietarios ante una medida novedosa en la ciudad que pretende combatir el exceso de viviendas vacías y la dificultad de encontrar alojamiento.