Shakira ha declarado ante el juez y ha conseguido evitar al medio centenar de periodistas que esperaban su llegada. Para ello ha alquilado una plaza de garaje en el mismo edificio. Ha prestado declaración como investigada por un presunto fraude fiscal de 14 millones y medio de euros. Dice que en los años 2012, 2013 y 2014 no residía en España, por lo que no estaba obligada a pagar impuestos a Hacienda.