Los tiros rompen el ritmo de la noche brasileña.
Nadie en la fiesta podía sospechar lo que iba a ocurrir. Siete hombres armados y con las caras cubiertas descendían de tres coches y una moto. Minutos después comenzaba un tiroteo en el que han muerto 11 personas y una se encuentra hospitalizada. Muchos de ellos no han podido ser identificados todavía.
Las autoridades continúan investigando, pero todo apunta a que fue un enfrentamiento entre bandas por temas de drogas. Ya que el bar es conocido por el tráfico y muchos de los fallecidos llevaban droga encima.
20 agentes acudieron de inmediato al lugar de los hechos; uno de los barrios más conflictivos de la provincia de Belem. Pese a que se aumentó la seguridad en la zona, el barrio registra una media de 15 muertos por mes.
Una de las muchas historias de violencia que se viven en los barrios pobres de Brasil.