Desde el año 2013, los pensionistas pagan por las medicinas en función de la renta de su pensión. Los tramos para calcular el pago están divididos en tres: hasta 18.00 euros, entre 18.000 y 100.000 y más de 100.000. La reforma que se baraja es dividir a su vez el tramo intermedio, el más amplio, en tres escalones: de 18.000 a 30.000, de 30.000 a 60.000 y de 60.000 a 100.000. Y será a esos nuevos tramos a los que les apliquen una subida progresiva, para que paguen más los que reciban pensiones más altas. El ministerio aun no aclara cuánto más pagarán, pero dicen que es una forma de asegurar que los parados de larga duración sigan exentos de pago. En cualquier caso, los nuevos baremos los tendrá que aprobar el Consejo Interterritorial de Sanidad.