Ya solo quedan horas y casi todo está preparado para esta noche, pero los pajes reales no dejan de trabajar. Las calles comerciales están repletas y es que muchos emisarios de los reyes están todavía buscando los encargos porque se han retrasado con la carta. Los que han dejado las compras para última hora tienen que darse ya mucha prisa, pero para ayudar a los magos muchos establecimientos van a retrasar su horario de cierre. Los ayudantes de sus majestades quizá se encuentren con que algunos de los juguetes más demandados estén ya agotados, pero en el tiempo que queda seguro que los reyes consiguen cumplir casi todos los deseos.