Los primeros copos ya han comenzado a cubrir las calles de Nueva York. A pesar de disfrutar de temperaturas veraniegas los últimos días, donde los termómetros marcaban 16 grados, la temperatura más alta registrada en el mes de febrero desde 1965, la ciudad se prepara para un temporal que cubrirá las calles con cerca de 30 centímetros de nieve. Las autoridades han anunciado el cierre de los colegios y miles de vuelos han sido cancelados. También el responsable de la oficina de emergencias de Nueva York, Joseph Esposito, se ha dirigido públicamente a los ciudadanos para explicar los riesgos y las medidas que deben tomar de cara al fuerte temporal en el que se alcanzarán los siete grados bajo cero. Casi 80 millones de personas se verán afectadas por esta nevada que algunos ya se atreven a calificar de histórica.