Fue uno de los primeros en darle su apoyo incondicional y ponerse su gorra roja durante la campaña. Ahora Jeff Sessions va a ocupar un puesto clave en el nuevo gabinete de Trump. Al final, el Senado le ha confirmado como nuevo fiscal general con 52 votos a favor y 47 en contra. Tras un largo y tenso debate en el que hemos visto cómo una senadora demócrata ha sido censurada por los republicanos por leer una carta de la viuda de Martin Luther King. El senador, que, en el pasado fue vetado para ser juez federal por acusaciones de racismo, sustituye así a Sally Yates tras su despido fulminante por desafiar a Trump y su veto migratorio. A partir de ahora Sessions va a defender en los tribunales el polémico decreto del magnate. La nueva regulación de los inmigrantes ilegales o las sanciones a las ciudades refugio. Un veto migratorio defendido por Trump en el que ha vuelto a cargar contra el poder judicial diciendo que los tribunales están muy politizados. Unas palabras que han descolocado hasta a los suyos. Neil Gorsuch, el juez que eligió él para el Tribunal Supremo, dice que sus críticas contra los jueces de los últimos días son desmoralizadoras.
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