El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no ha querido desmentir ni confirmar la existencia de una reunión secreta con el presidente de la Generalitat Carles Puigdemont el pasado 11 de enero y se ha limitado a recalcar que su posición "es la misma de siempre" y se resume en la necesidad de abordar con Cataluña todos "los problemas que afectan a la gente" pero en ningún caso fórmulas "para saltarse la ley" y celebrar un referéndum que "liquidaría la soberanía nacional".
Así se ha pronunciado cuando se le ha preguntado al respecto en los pasillos del Congreso de los Diputados. "Yo quiero hablar con él, pero sobre los problemas reales y no sobre liquidar España ni la ley", ha afirmado.
-Redacción-