Miles de personas desfilaron este sábado por las calles de Sídney en el tradicional Mardi Gras, un evento festivo, vinculado al carnaval, en el que se reivindica la igualdad, la tolerancia y los derechos de la comunidad LGBTQI, protagonista de la marcha. Más de 250.000 personas, según los organizadores, presenciaron la celebración en la ciudad australiana. Disfraces imposibles, bailes atrevidos y mucho colorido en una marcha que cada año suma más seguidores. El lema de esta edición ha sido 'Creando Igualdad', un mensaje de carácter político, muy crítico con el propio gobierno de Australia, que aún no ha aprobado el matrimonio entre personas del mismo sexo.
-Redacción-