Este domingo arranca la segunda vuelta de las presidenciales en Francia. El conservador Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen se enfrentan en las urnas. Los jóvenes franceses se debaten entre el voto en blanco y el voto útil. "Siempre es lo mismo, siempre votamos en contra de en vez de votar a favor de. Es una vergüenza, pero esa es la democracia de la segunda vuelta, tenemos que lidiar con ello", asegura Sarahel Vetral, una estudiante de 20 años enfadad con el sistema electoral. "No quise votar por alguien por el que no me sentía identificado, sino por alguien cuyas ideas me fueran cercanas, por eso no voté ni votaré en esta segunda vuelta", reconoce Wesley Obonou, un joven bailarín descontento con los candidatos al Elíseo. Hay algunos que acudirán a votar, aunque no se sientan representados, como Sofiane Mokkedem. "Es complicado, porque no quiero votar por Macron y tampoco quiero votar por Le Pen, pero votar en blanco favorece a Marine Le Pen, por eso creo que votaré por Macron a regañadientes".
-Redacción-
