A cuentagotas se van conociendo las identidades de las siete víctimas mortales en el ataque de Londres. Las autoridades investigan si una octava persona podría haber perdido la vida al caer al río. Todavía hay cinco desaparecidos. La policía británica tan solo ha confirmado la suya. La de la canadiense Cristine. Arrollada por la furgoneta de los terrorista, esta trabajadora social murió en los brazos de su prometido. Casi sin poder hablar, se dirigía a los medios la hermana de James. La policía había encontrado en uno de los cuerpos la tarjeta de crédito de este londinense de 32 años. Murió al ser atacado cuando salió del pub donde estaba con unos amigos. Herido de muerte también acabó él: Alexander, un camarero francés de 27 años de cuyo fallecimiento informaba la prensa francesa. Noticias que llegaban esta misma madrugada desde Australia, donde las autoridades hacían oficial que dos de las víctimas eran de allí. Una sería Kirsty. Enfermera de 28 años. Su familia lo ha confirmado. Murió al intentar ayudar a la gente. Y a pesar de que la otra identidad no ha trascendido, todo indica que es ella. Sara. La niñera de 21 años a la que se buscaba desesperadamente. De ser así, cinco de las siete víctimas ya estarían identificadas. Mientras para algunos la búsqueda continúa. Como la del francés Xavier. Cruzaba el puente con su novia cuando ambos fueron atropellados. Ella resultó gravemente herida, mientras él desapareció. La hipótesis que cobra más fuerza es que cayó al río donde murió. De confirmarse, podría ser la octava víctima.
-Redacción-