Se plantan con un rollo de plástico en la terminal. Ilegales, que envuelven las maletas por la mitad de precio. Llevan 3 años campando a sus anchas. Son medio centenar y se reparten por todo el aeropuerto. Han crecido tanto que la empresa legal ha denunciado a AENA por no hacer nada para que desaparezcan. Pero AENA asegura que ellos no tienen la potestad de echar a nadie, que la seguridad del aeropuerto está en manos de las fuerzas de seguridad del estado.