Le cazaron así: "Se le detuvo cuando salía de casa de su pareja. No opuso resistencia". Es lo que ha dicho la Policía. Amenazaba a las jóvenes a punta de pistola. Las metía en su coche, y en dos ocasiones las amordazó y les tapó los ojos. Las daba vueltas y en alguna vez se las llevó a su piso alquilado de Segovia donde vivía solo. Allí consumaba la violación. Después devolvía a las víctimas en el entorno donde las había raptado.
-Redacción-