Bienvenidos al paraíso que hoy no van a pisar. En el barco se escuchan cánticos, que suben de tono cuando se dan cuenta de esta realidad. Porque el domingo la Guardia Civil obligó a regresar a 3 embarcaciones a puerto. Y la cosa aún empeora el lunes, otros 2mil visitantes se quedan en tierra a pesar del billete. La Xunta ha abierto 26 expedientes a las navieras, 6 de ellos por exceso de viajeros. Amenazan con ponerse más contundentes, para que las multas sean mayores a los 37.000 euros diarios que se llegan a embolsar por vender más entradas de las 2.200 estipuladas. Pues al final los afectados son los pasajeros, que se sienten engañados. El exceso de aforo además pone en riesgo su situación en caso de evacuación. Sin hablar del terrible daño medio ambiental que sufre este Patrimonio Natural.
-Redacción-