La convivencia en las aceras entre viandantes, patinetes o ruedas eléctricas, segways o bicitaxis es cada vez más difícil. Por ello, el Ayuntamiento de Calvià, Mallorca, ha decidido cortar por lo sano. Ya han firmado un decreto que prohíbe que estos vehículos circulen. Hasta ahora lo hacían poniendo en peligro la integridad física de los peatones, residentes y turistas. Aunque también la de los propios usuarios, ya que circulan a una velocidad considerable y no se exige el uso de casco o demás protecciones. En Barcelona también han decidido regular su uso. A la espera de que entre en vigor la prohibición de circular con ellos por el centro de la ciudad, se estudian multas de entre 100 y 500 euros. Decisión que afecta a muchas empresas. Muchos ayuntamientos se ya plantean seguir este ejemplo. En Sevilla regularon su uso en 2014, en Granada desde hace sólo unos meses. Por el momento Madrid estudia tomar medidas. Queda abierto el debate.
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