La Audiencia Nacional va a investigar por un delito de sedición, castigado con hasta diez años de cárcel, a los responsables de los incidentes registrados en Barcelona la semana pasada durante una operación policial contra altos cargos del Gobierno catalán. La juez encargada del caso justifica que el delito sea competencia de la Audiencia Nacional al entender que los incidentes tenían como fin, además de impedir la operación policial, cambiar ilegalmente la organización territorial del Estado. De momento, la juez ha pedido a la Guardia Civil el atestado de los incidentes.
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