Halloween ha llegado a la Casa Blanca y Donald Trump ha sido el anfitrión por primera vez desde que llegase a la presidencia. El mandatario ha repartido cientos de caramelos a niños disfrazados junto a la primera dama, en un escenario decorado con telarañas gigantes. Sin embargo, ni siquiera en una ocasión como esta han conseguido alejarse de la polémica porque Trump ha preguntado a los hijos de los periodistas cómo podían ser tan bonitos siendo descendencia de la prensa. México, por su parte, también decora las calles con calaveras para homenajear a sus muertos.
-Redacción-