Los gritos de dolor y repulsa abarrotan la plaza de la Constitución de Elda, en Alicante. Esta pequeña ciudad valenciana expresa su repulsa a la violencia machista. Alguna ya ha perdido el miedo a contarlo y lo grita a los cuatro vientos: hay que denunciar. Desde las instituciones hay que seguir trabajando. Tenía sólo 28 años y aunque ha luchado por su vida durante más de 24 horas, los cinco tiros que le pegó su expareja han acabado con ella. Este jueves su agresor tendría que haber declarado por una denuncia de malos tratos. Pero por desgracia, Jessica se ha sumado a la larga lista de mujeres asesinadas por sus parejas.
-Redacción-