Que Carles Puigdemont esté a más de 1.300 kilómetros de Barcelona empieza a hacer mella en las cuentas del PDeCAT. La campaña aún por empezar y cualquier viaje es un gasto difícil de asumir. Hasta el punto de que el partido, lo publica El Confidencial, se negó a pagar un billete de avión a Bruselas a Elsa Artadi, próxima a Puigdemont, directora de campaña y miembro de su candidatura, pero no militante del PDeCAT. Como Jaume Clotet, exdirector de comunicación de la Generalitat, a quien tampoco se le abonó el vuelo.
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