Si tener que abandonar el hogar no fuera suficiente, a 25.000 refugiados sirios se les ha sumado esto Las fuertes lluvias han anegado completamente las tiendas donde viven. Les ha dejado sin lugar para cobijarse. Han tenido que abandonarlas, ante la impotencia de ver como la corriente arrastraba todo a su paso. Por suerte no hay que lamentar ninguna víctima