Los diez manifestantes arrestados tras los disturbios del miércoles en Madrid ya han sido puestos en libertad, incluido el bombero que se enfrentó a varios agentes cuando apagaba un contenedor en llamas. La imagen de su detención sorprendió a todos, incluso a sus compañeros que fueron a apoyarle a las puertas de los juzgados. Deberá responder por un presunto delito de atentado a la autoridad.