Lo escriben en las ventanas, en la aceras, y lo gritan en la calle. No quieren el bulevar. Desde el Ayuntamiento, en cambio, Ángel Ibáñez, Vicealcalde de Burgos afirma que no es normal quejarse por una obra que supone una inverión y una mejora en el barrio.Pero en el barrio se quejan. Dicen que no es el momento, que el Ayuntamiento está endeudado y que hay otras prioridades en las que gastarse ese dinero. La misma opinión tiene el PSOE en Burgos, su secretario general, Luis Tudanca, cree que en un barrio empobrecido por la crisis esta obra no tiene sentido. Los vecinos denuncian también que detrás del bulevar hay intereses ocultos pero el Consistorio lo niega. Ángel Ibáñez dice que se están contando y difundiendo falsedades y que el constructor del que todo el mundo habla en la ciudad no ha participado en la licitación del proyecto.En cuanto al aparcamiento, Ángel Ibáñez afirma que la supresión de 200 plazas en la calle se va a suplir con un nuevo parking de 600 a menos de dos minutos andando. Los vecinos dicen que esas plazas son un solar y que no son plazas nuevas puesto que ya llevan tiempo usandolas.