El ejército iraquí junto con milicias chiíes y kurdas, combaten en la ciudad de Tikrit, a 140 km de Bagdad. Han conseguido avanzar y hacer retroceder a los yihadistas del Estado Islámico. Pretenden proteger la región de Samara, donde los chiíes conservan varios santuarios. Los terroristas habían ocupado la ciudad de Tikrit en junio, y el ejército intenta recuperarla desde entonces. Esto, después de que el Parlamento diera el visto bueno a un Ejecutivo de unidad liderado por el premier Haidar al Abadi, cuyo principal objetivo es combatir a los yihadistas del ISIS.