La crisis está pasando factura a la vista de los más pequeños .Tras someter a revisión a 150 niños de un colegio de Badalona, se ha detectado que un 23% tiene problemas de visión que los padres desconocían. Cuando lo normal es encontrar sólo el 10%. Sus familias no se pueden permitir llevarlos a revisiones privadas y en la seguridad social la cita requiere una espera de más de un año. Comprar unas gafas es todo un esfuerzo para familias con pocos recursos. Pero si el problema no se ataja a tiempo los daños pueden ser irreversibles. Una miopía o un ojo vago se puede corregir o incluso curar, pero la prevención es el mejor tratamiento. De forma altruista una asociación va a entregar gafas a los niños de esa escuela.
