De dedender los intereses de Iñaki Urdangarin, Mario Sorribas, hombre de confianza del duque de Palma, pasa al otro lado, al de los que tumban los argumentos del yerno del Rey. La abogada del sindicato Manos Limpias, Virginia López Negrete, ha trasladado a los medios de comunicación que en su declaración, Sorribas ha asegurado que Iñaki Urdangarín no desapareció del Instituto Nóos en marzo de 2006, que tras el toque de atención de Don Juan Carlos, el duque siguió en la gestión de la fundación heredera de Nóos codo con codo con Diego Torres. El ex asesor del Duque de Palma sostiene ahora que tanto urdangarin como Diego Torres lideraban la Fundación Depoprte, Cultura e Integración Social, cambiando así su versión de los hechos. También afirma que en Aizóon, la sociedad que compartían al 50 por ciento los Duques de Palma, sólo trabajaba Urdangarín. La soledad del marido de la infanta se acentúa con la declaración del imputado Miguel Zorio, presunto conseguidor de varios negocios en Valencia, que calca la declaración de Sorribas, y con la de un empresario que asegura que cada vez que él y Urdangarían se reunían con el Valencia Club de Fútbol facturaban 10 mil euros.