Conjura de los socialistas madrileños. "Porque el objetivo es el mismo", afirma Jaime Lissavetzky, el portavoz socialista en la capital. "Éste es el momento de dejar atrás cualquier tipo de deferencia". "Van a poner mucho empeño y mucho dinero, pero no van a poder con nosotros", ha expresado Tomás Gómez, secretario general del PSM. Todos a una, el PSOE quiere recuperar Madrid, "el laboratorio de las derechas", ha dicho Alfredo Pérez Rubalcaba. Más conciliador, sin duda, al hablar del pacto con el PP para Europa. El secretario general del PSOE lo ha explicado con éste símil: "El Madrid y el Barcelona, cada domingo disputan con uñas y dientes por ganar al otro. Pero cuando llega la hora de defender a España juegan todos con la misma camiseta". Pero Izquierda Unida ha preferido utilizar otro ejemplo, el pacto sidecar. "El sidecar lo conduce el de la moto, que es Rajoy", ha dicho Cayo Lara, coordinador federal de la coalición. "Y en el aparatito ha subido a Rubalcaba, que es el que va en el sidecar. El camarada Rubalcaba no controla el vehículo, por eso, cualquier día, el Mariano lo puede estrellar perfectamente contra un árbol". Mariano, y su Gobierno, que insiste en los signos positivos. Esta vez, el ministro de Industria, José Manuel Soria. "Hay algunos motivos para decir que estamos al final del tunel, que ya vemos la luz al final del túnel". Aunque vendrá muy bien que los bancos se animen y den crédito sobre todo a las PYMES.