Última aparición de Ariel Castro durante la lectura de los 997 cargos que se le imputan. El también conocido como el monstruo de Cleveland, no ha querido levantar la vista y se ha declarado inocente de todos los cargos criminales presentados contra él por el secuestro de tres jóvenes durante 10 años. La jueza ha inistido varias veces en que levantara la cabeza y abriera los ojos durante la breve comparecencia ante el Tribunal.