La Policía Nacional ha llevado a cabo la operación más importante contra una "oficina de cobros" desarrollada en España. Los jefes de esta banda de sicarios eran tres hermanos colombianos. El cabeza del grupo, está reclamado por homicidio en Colombia, y de los otros dos hermanos, uno de ellos también está reclamado en España por haberse fugado de la cárcel en el 2001. Allí cumplía condena por tráfico de drogas. Se trataba de una de las principales oficinas que actuaban en España y, sin duda, la más importante que había en Madrid. La operación se ha saldado con 16 detenidos, 15 de ellos colombianos, que pertenecían a esta organización. Ellos hacían lo que se conoce con el término de "amarre", que consiste en secuestrar a la víctima hasta que ella o su familia pague las deudas contraídas por operaciones de narcotráfico. Habían llevado a cabo cientos de extorsiones y tenían previstos tres nuevos secuestros. Entre el material incautado hay multitud de aparatos electrónicos, varias armas, cocaína y 135.000 euros además de vehículos y otros bienes que las vícitmas usaban para saldar sus deudas.