Los inspectores enviados por Naciones Unidas a Siria para investigar el presunto ataque con armas químicas del que el régimen de Bashar Al Assad y la oposición siria se acusan mutuamente ya han aterrizado en Líbano tras dejar la capital de Siria, Damasco.Allí han estado cuatro días, recogiendo pruebas e investigando. El pasado viernes 18 de agosto visitaron el hospital militar de Damasco. Los días anteriores se trasladaron a otras localidades controladas por las fuerzas rebeldes. En todos han entrevistado a las víctimas y recogida pruebas del ataque.Martin Nesirky, portavoz de la ONU, informa de que ya están elaborando un informe que difundirán "lo antes posible" una vez concluido el proceso científico.