En Grecia se ha puesto en marcha una normativa que permite comerciar con productos con la fecha de consumo preferente vencida. Estos productos se deben exponer apartados y su precio es más barato. Aún así sigue estando prohibido vender alimentos caducados. El objetivo es reducir el despilfarro de comida. En España está prohibido vender cualquier producto cuya fecha recomendada del fabricante haya expirado.