Un total de 600 alumnos no pueden ir a la universidad por los recortes y la subida de las tasas. Por eso, los alumnos de la universidad Jaume I de Castellón han protestado en el inicio del curso.Los estudiantes pide un sistema más flexible y que les den más tiempo para abonar la matricula para que de esta manera nadie se quede fuera de la universidad por motivos económicos.