El número de víctimas por accidentes de tráfico por primera vez baja de los 2.000, siendo éstos 1.903 fallecidos, la cifra más baja jamás contada. Pese a esta esperanzadora cifra que corresponde al año 2012, la situación sigue siendo traumática, ya que, como ha comparado la Directora General de Tráfico, María Seguí, equivale a dos accidentes de tren de Santiago cada mes en nuestro país. Aumentan los ciclistas fallecidos en carretera y las víctimas por accidentes urbanos. De haber llevado bien abrochado el cinturón de seguridad o un casco en el caso de las motos podrían haberse salvado 140 personas. En cuanto al perfil de los fallecidos, el 76% eran hombres, que sufrieron un accidente durante su jornada laboral. Pero lo más preocupante son los niños. Cincuenta y dos menores de 14 años han perdido la vida en las carreteras españolas por no ir bien abrochados en la sillita reglamentaria, diez más que en 2011.
