El juez Castro ya tiene un nuevo hilo con el que vincular a la Infanta Cristina con las actividades presuntamente delictivas de su marido. La Agencia Tributaria ha puesto en sus manos el contrato original de arrendamiento de la vivienda que comparten, la de Elisenda de Pinós, el palacete. Y hay sorpresa, los Duques de Palma alquilaron el inmueble a Aizoon, la empresa propiedad al 50 % de los Duques de Palma. Este es el documento, en el apartado de las firmas como arrendador, Iñaki Urdangarin y Cristina de Borbón, como arrendatario Iñaki Urdangarin y Cristina de Borbón. Es más que una coincidencia, es la rúbrica a varios datos en los que el juez puede apoyar su decisión inminente de imputar o no a la Infanta. Uno, el palacete de Pedralbes era en principio su domicilio, no hay constancia de que existiera allí ningún despacho profesional; dos, no hay constancia tampoco de que Aizoon haya tenido actividad real desde 2003 y el contrato es de 2006. El autoarrendamiento además cuestiona el argumento con el que alguna de las partes ha querido exonerar de responsabilidad penal a la Infanta diciendo que aunque era propietaria al 50% no era consciente de las actividades de Aizoon. Aizoon es la sociedad a la que Urdangarin desvió parte de los casi seis millones de euros que obtuvo junto a su socio Diego Torres de las administraciones públicas con contratos de dudosa legalidad. La Infanta usó la visa de Aizoon, una tarjeta de empresa para sufragar numerosos gastos privados.
