La sesión de control al Gobierno ha vuelto a escenificar una sucesión de monólogos en forma de diálogo alterno, pero sin concatenación lógica entre pregunta, respuesta, réplica y contrarréplica. Alfredo Pérez Rubalcaba ha preguntado al presidente del Gobierno por la evolución salarial de los españoles en los últimos años, a lo que el presidente del Ejecutivo ha respondido con las cifras de evolución salarial y el diferencial de inflación que permite mantener el poder adquisitivo de los asalariados. Ha sido entonces, cuando en la réplica del líder socialista, éste le ha reprochado al Ejecutivo que haya aplicado una Ley del embudo para aumentar la desigualdad entre las rentas más altas y las más modestas, concluyendo que si siempre alude a la herencia recibida del anterior gobierno, ya va siendo hora de que explique la herencia recibida por parte del presidente del PP, Mariano Rajoy al presidente Rajoy para aclarar la contabilidad B del PP y los sobresueldos. La respuesta de Rajoy ha sido retomar el debate sobre políticas económicas y enumerar el número de parados en 2009 y 2010 y cómo las medidas de la última reforma laboral han contribuido a reducir el número de desempleados.
