El cura de Borja abandonaba anoche el centro penitenciario de la localidad zaragozana de Zuera.Y aunque confiado en la verdad, fue el primer sorprendido en salir tan pronto.Florencio Garcés estaba en prisión provisional dictada por la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Tarazona, Nieves Pérez tras ser imputado por un delito de apropiación indebida de más de 185.000 euros, que aún se mantiene, y de otro contra la libertad sexual que se levanta.El cura volverá cuanto antes a sus obligaciones con los fieles pero deberá personarse en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes.