El frío extremo sigue golpeando el viejo continente. Más de 630 personas han muerto a causa de las bajas temperaturas. La situación es especialmente complicada en Rumanía: cerca de 30 fallecidos por hipotermia en las últimas horas, miles de personas aisladas y los transportes paralizados.Los tractores se han convertido en el único medio para llevar la ayuda a las seis mil personas que ha dejado atrapadas la nieve, porque otro tipo de transporte es casi inviable. Ni los coches de caballos pueden circular por unas carreteras congeladas.En tierra también se buscan salidas. Los servicios de emergencia rescatan a quienes quedaron ahogados por la nieve en el interior de sus casas. Son 21 las aldeas más afectadas. Lugares donde todos sus habitantes se vuelcan en los trabajos que les permitan volver a la normalidad. Intentan restablecer el tendido eléctrico. Y evitar que la cifra de 27 muertos aumente.