El mapa sonoro de A Coruña se realiza a través de un programa de cálculo informático y siete medidores acústicos, situados en Bens, el Orzán, Matogrande, Juan Flórez, Alfonso Molina y las plazas del Humor y Azcárraga. El programa que dibuja el nivel de ruido que se alcanzan en los diferentes barrios de la ciudad funciona con la introducción de diversos parámetros, como la cantidad de tráfico que soporta o la cantidad de gente que vive. El programa calcula así el nivel de ruido que tendrá. Como refuerzo a estos cálculos, los siete medidores que están repartidos por la urbe -y que pueden cambiar de ubicación- completan esas proyecciones informáticas con más datos sonoros.