Sorpresa y cierto temor son las primeras impresiones que estos folletos del Ejército británico han causado en una comunidad de vecinos que vive junto al Parque Olímpico. Apenas quedan unos meses para que arranquen los Juegos de Londres y las medidas de seguridad son ya una prioridad. Desde el Ministerio de Defensa no quiere dejar ningún cabo suelto. Por eso se está estudiando instalar en las azoteas de este edificio misiles tierra-aire. Además, patrullas de soldados se encargarán de vigilar el vecindario durante el tiempo que dure el evento deportivo. La medida ha cogido a los londinenses bajo el desconcierto, que no saben si sentirse más o menos seguros con todo este operativo. En cualquier caso, el gobierno de Cameron ya ha anunciado que la instalación de los misiles no está confirmada ni será inmediata. Antes, a principios del próximo mes de mayo las Fuerzas Armadas británicas realizarán una serie de pruebas para comprobar su utilidad.