Todavía sin agua y sin luz, pero con los empalmes preparados porque pronto la van a conseguir manipulando la instalación. Pedro es uno de los cerca del centenar de integrantes de la Plataforma de afectados por la Hipoteca de Sabadell. Como tantos otros, ha traído comida de su casa para ayudar a instalarse a las dos familias que esta semana entraran a vivir. Las dos familias prefieren no ser grabadas. Hablamos con una de ellas, vienen de Gambia y llevan años al borde del abismo. Los integrantes de la plataforma eligen en asamblea quién tiene prioridad para ocupar el piso. Las familias elegidas pagarán lo que denominan un "alquiler social": una mensualidad adaptada a la medida de sus posibilidades que ingresarán en una cuenta para demostrar que existe una responsabilidad y una ética. La misma, que aseguran, les falta a los bancos. En esta habitación varios vecinos duermen y hacen guardia, esperanzados con que, como ha sucedido en los dos pisos ocupados en la vecina Terrassa, los Mossos d'Esquadra no les desalojen.
