A cinco días para que Grecia despeje su futuro político, el líder de la formación izquierdista Syriza, Alexis Tsipras, promete trabajar por asegurar la permanencia del país en la Eurozona, negando así los rumores de que el país abandonará el euro. Ha criticado al anterior gobierno que, sin negociar, aceptó un plan de rescate nefasto para el país y lo ha comparado con el plan de rescate europeo a la banca española.Un plan, del que aún se desconocen las condiciones y que ha sembrado la incertidumbre en los mercados. De nuevo, la prima de riesgo de la deuda española subió ayer al cierre hasta los 528 puntos y la rentabilidad del bono a 10 años tocó maxímos, por encima del 6,7 por ciento. La bolsa volvió a caer. En medio de la tempestad, nuestro ministro de Economía sigue defendiendo una Europa unida. Hasta la canciller alemana dice que ha sido una buena medida que España solicitase ayuda, porque asegura que la crisis bancaria es la consecuencia de la burbuja inmobiliaria en los últimos diez años. Una medida que, por ahora, no está dando los resultados esperados por el Gobierno.