"Pan para hoy y hambre para mañana", una expresión tan española reflejaba la protesta de los 700 manifestantes que según la Guardia Urbana se han concentrado en la Plaza Sant Jaume de Barcelona para rechazar el proyecto de Eurovegas en la zona del Bajo LLobregat de Cataluña y también en Madrid.Rechazo de pleno a un proyecto que consideran poco transparante y en las antípodas del modelo económico y social deseableLa apuesta por modelos respetuosos con los recursos naturales y confiar en la economía productiva y el atractivo turístico de Catalunya sería según los manifestantes la solución al alto índice de paro de la zona.Cataluña trabaja con la hipótesis de que la primera fase de Eurovegas contará con más de 8.000 tragaperras, dos casinos y cuatro hoteles y que generará 16.000 empleos. En ocho días llegan los representantes de Adelson y en dos o tres semanas podría conocerse quién será finalmente la novia del juego y si es española.