Santiago de Chile volvió a convertirse en campo de batalla de los enfrentamientos entre estudiantes y policía. Más de un año de protestas porque dicen sentirse frustrados por el fracaso del gobierno para dar una respuesta adecuada a sus demandas.Los manifestantes lanzaron piedras y otros proyectiles a los agentes, levantaron barricadas y la policía respondió con cañones de agua y gases lacrimógenos. 200 personas han sido detenidas.Sin embargo, por la mañana unos 100.000 estudiantes marcharon pacificamente reclamando, una vez más, una reforma del sistema educativo, así lo señalaba la líder estudiantil Camila Vallejo. Los jóvenes insisten en que el actual es un sistema injusto y se ha cobrado muchas víctimas, como Claudia Parada, una manifestante, joven madre que pide cambios para que sus hijos no tengan que dejar los estudios como le ocurrió a ella.Por eso piden una educación pública, gratuita y de calidad.