Las autoridades brasileñas continúan luchando contra las mafias que controlan las favelas en Rio de Janeiro. 2.000 agentes han participado en la última operación. En solo 20 minutos, han tomado dos de de los asentamientos, aunque no ha habido ningún detenido. El objetivo es implantar en estos sitios nuevas unidades de policía pacificadora en menos de un mes. Los tanques se retiraban de noche. Y aunque algunos efectivos continuaban las inspecciones, en tan solo 20 minutos acababa la denominada operación Día D.