El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, defiende a su número dos, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, de quienes le vinculan con el caso Faisán, el caso que investiga el supuesto chivatazo que habría 'soplado' a la banda terrorista ETA que en cualquier momento podrían detener a algún miembro.