La guerra en Libia está eclipsando al resto de países de la esfera árabe donde prosiguen las revueltas, y donde se viven situaciones de auténtico drama. En Siria, centenares de personas se han echado a la calle en masa para despedir a los manifestantes fallecidos. En Yemen, un país convulsionado por las jornadas más sangrientas, se han celebrado multitudinarios funerales por los 52 muertos de los últimos días. Idéntica situación en el reino de Barehim, donde han enterrado a los caídos en las protestas contra el régimen, y dónde -lejos de extinguirse- continúan las revueltas.