El acuerdo pesquero entre la Unión Europea y Marruecos se ha roto. La Eurocámara ha votado en contra de su renovación por lo que un centenar de pesqueros españoles, en su mayoría andaluces y canarios, no podrán faenar en sus aguas. La reacción de Rabat no se ha hecho esperar y ha dado la orden a todos los barcos europeos que abandonen sus costas de inmediato. Estrasburgo considera que el acuerdo interfería en los recursos del Sáhara Occidental.