El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho insistió hoy en que "la reforma no abarata el despido". "Cualquier trabajador con contrato indefinido percibirá la misma indemnización, antes y después de la reforma; es decir, 45, 33 ó 20 días según el tipo de contrato y la causa de extinción", puntualizó. Asimismo, Corbacho apeló a la responsabilidad de todos los grupos para apoyar la reforma. "Estamos Convencidos de que es la reforma que precisamos para impulsar la recuperación económica, mejorar competitividad y hacer del empleo un factor más productivo, equitativo y de mayor calidad", concluyó.