Los grupos de crimen organizado han crecido un 12% en los últimos años. En 2009, el Ministerio del Interior ha investigado a 616 bandas, la mitad de ellas integradas por extranjeros. Cerca del 60% han quedado completamente desarticuladas. La mayor parte de estas bandas se dedicaban al tráfico de drogas, el resto, a otras actividades como delitos contra el patrimonio o trata de blancas.