El FBI ha llevado a cabo una operación histórica contra la corrupción policial en Puerto Rico. Más de 130 agentes de policía, militares y funcionarios de ese país han sido detenidos acusados de colaborar con el negocio de la droga. Los detenidos ofrecían protección armada a los narcotraficantes durante las operaciones de compra y venta de droga en Puerto Rico. Vigilaban la zona y lo hacían vestidos de uniforme. Ayudaron a los traficantes en más de 125 ocasiones. Por ello recibían un soborno de entre 300 y 3000 euros. Es la mayor operación contra la corrupción policial en la historia del FBI. Lo es por la logística del operativo, se ha movido a más de 750 agentes del FBI de varias partes del país, y también por el número de detenidos, 133; los agentes implicados, 91 y el tiempo de seguimiento: más de dos años de investigación. Por eso, Estados Unidos ya se ha comprometido a ayudar en la lucha contra la corrupción.
